sábado, 8 de enero de 2011

Investiga la PGR Cártel de Altura en Aeroméxico


Escrito por DDM
Viernes, 07 de Enero de 2011

Los tentáculos del narcotráfico ya alcanzaron a los sobrecargos, quienes, según indagatorias de la Procuraduría General de la República (PGR), conforman el cártel de "Galis" (de la palabra "galley", que es el nombre en inglés de la cocineta de los aviones), y que en complicidad con personal de tripulación de Aeroméxico crearon una red que introducía cocaína a España.

De acuerdo con información de la dependencia, encontró que un piloto y un sobrecargo pertenecen a esta estructura, aunque no han sido detenidos. También participan elementos de la Policía Federal.

En una casa de cambio de la Terminal 1, los integrantes de la banda delictiva, que llevaría tres años operando desde la Terminal 2 del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), realizaban sus transacciones de divisas, pues cada uno ganaba el equivalente en dólares a 600 mil pesos, por cada cargamento.

La PGR se cree que los sobrecargos hacían una o dos entregas al mes, podrían haber realizado hasta 36 viajes.

El modus operandi de la banda era ingresar al aeropuerto con su uniforme de trabajo para después recibir las maletas con la cocaína dentro de la terminal, viajando en activo o como turistas.

"Sabemos que hacían viajes tanto como tripulantes en activo como viajando de turistas. Las autoridades están analizando las listas de pasajeros y están revisando los vuelos que hicieron a España porque, al parecer, podría haber una persona, responsable de asignar vuelos, que estaría en complicidad para favorecerles esa ruta y que al parecer es familiar de uno de ellos", indicó una fuente cercana a la investigación.

Los policías federales introducían la droga por un acceso externo de la terminal, para evitar las revisiones en los filtros de seguridad.

Luego entregaban el material a pilotos y/o sobrecargos en baños o zonas poco visibles para las cámaras de seguridad.

Las indagatorias detallan que las maletas viajaban llenas de cocaína a España y regresaban a México con el pago del cargamento, por lo que habrían sido elementos de la Policía Federal quienes les dieran rutas de salida para evadir la revisión aduanal.