Es una verdadera pena que esto suceda en la ASSA. Después de una historia sindical reconocida hasta por especialistas en la materia –se dice en el medio que ASSA es una joya del sindicalismo, con una trayectoria de lucha y de conquistas laborales a través de sus más de 50 años de historia- un pequeño grupo de sobrecargos de Aeroméxico intentó un movimiento violento al tratar de meterse a la fuerza a la oficina de la Secretaría General. Lo indignante es que lo lideraban ex representantes sindicales, entre ellos, Patricia Benitez, exsecretaria del Trabajo y fundadora del Centro de Estudios de ASSA y Francisco Villarreal, exsecretario General, fundador del Centro de Estudios de ASSA y ahora empleado de Aeroméxico (siempre estuvo presente en las afueras de ASSA y al principio se acercó a platicar con los manifestantes). Esto es una clara intromisión de la Empresa en nuestra vida sindical. Ojo autoridades.
Podemos estar o no de acuerdo con algún representante, pero llegar al extremo de aliarse a la empresa para destruir a la ASSA es vergonzoso. Y digo esto porque al sabotear la Reforma Estatutaria están intentando que la Asociación caiga en la parálisis.
Yo me pregunto: ¿en dónde estamos los demás sobrecargos?
Si la mayoría desea esto, entonces digámoslo así. Ahí están las urnas y la oportunidad de demostrarlo para terminar con nuestro sindicato de manera ordenada y sin consecuencias, por lo menos económicas (aunque desde mi punto de vista sería desastroso); si no queremos eso, asistamos a votar por la persistencia de nuestra Asociación.
Iván Enríquez